Xavi tuvo una charla cara a cara con los jugadores tras el empate 3 a 3 con Granada.
Xavi Hernández ha querido enfocar la charla posterior al partido en un ámbito puramente emocional. En lugar de analizar los errores deportivos, el técnico egarense ha optado por levantar el ánimo de la plantilla y apelar al amor propio.
El entrenador ha detectado que parte del grupo se encuentra ‘sedado’ y bloqueado anímicamente. Es consciente de que la recuperación psicológica de todos los jugadores es vital para el próximo desplazamiento a Vigo y, sobre todo, para la ida de los octavos de final de la Champions League ante el Nápoles.
El objetivo y la ilusión prioritaria a corto plazo es activarse como sea. Quedan días para el partido en el Diego Maradona y el técnico catalán quiere que sus jugadores lleguen en las mejores condiciones posibles.
Este cambio de enfoque por parte de Xavi demuestra su capacidad para leer las necesidades del grupo y adaptarse a las diferentes situaciones. En este momento, lo más importante es recuperar la confianza y la motivación de la plantilla para afrontar, sobre todo, el duelo por la Champions League.
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