Florian Lejeune derribó a Robert Lewandowski con una toma más parecida del judo que de fútbol.
Barcelona protestó por lo que fue el penal que Espino le cometió Raphinha. Tanto para el juez del encuentro, Munuera Montero, como para el VAR el contacto no fue suficiente como para sancionar infracción.
No obstante hubo otra jugada mucho más grosera que podría haber terminado en la pena máxima para el elenco de Xavi Hernández.
Fue de Florian Lejeune, que tomó por la espalda a Robert Lewandowski y literalmente lo arrojó al terreno.
Tal secuencia no fue advertida por ninguno de los integrantes de las autoridades designadas para administrar el juego que se llevó a cabo en Vallecas este sábado 25 de noviembre.
Lo cierto es que Barcelona empató 1 a 1 y dejó escapar dos puntos vitales para la lucha en la zona alta de la tabla de posiciones de LaLiga.
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