A solo cuatro días para que ruede el balón en una nueva temporada de La Liga, el FC Barcelona se encuentra inmerso en una carrera contra el reloj con varios desafíos fuera del campo de juego. El equipo de Hansi Flick afronta un inicio de temporada lleno de interrogantes que van desde la formación de su plantilla hasta la fecha de su esperado regreso a casa.
Un retorno al Camp Nou en el aire
El regreso al renovado Camp Nou, inicialmente programado para la cuarta jornada liguera, pende de un hilo. Una reciente inspección de la ECA ha revelado más de 200 deficiencias, que abarcan desde problemas de evacuación y accesibilidad hasta fallos eléctricos. A pesar de que el Ayuntamiento de Barcelona había autorizado un aforo inicial de 27,000 espectadores, la apertura parcial del estadio depende de la aprobación de la ECA y otros permisos, complicando la situación.
El presidente Joan Laporta se muestra optimista, pero la posibilidad de tener que seguir jugando en el Estadio Olímpico de Montjuïc gana enteros. De hecho, esta incertidumbre no solo afecta a los partidos de Liga, sino también a la UEFA Champions League, ya que el club debe comunicar una sede fija para toda la competición continental antes del 21 de agosto. Un retraso en la obra podría significar que el equipo dispute todos sus encuentros europeos lejos de su feudo. Además, la demora en la validación de los palcos VIP, una operación clave para la economía del club, también se ve afectada.
Ocho jugadores a la espera
Otro de los grandes frentes que el club debe resolver es la inscripción de ocho futbolistas. El Barça aún no ha podido registrar a nuevos fichajes como Joan García, Marcus Rashford, y Roony Bardghji, así como a jugadores que renovaron su contrato, como Wojciech Szczesny, y prometedores canteranos como Gerard Martín, Héctor Fort, Marc Bernal, y Oriol Romeu.
La situación más apremiante es la del guardameta Joan García, cuya inscripción está supeditada a que se confirme la baja médica de larga duración de Marc-André ter Stegen. Con el reloj avanzando, la directiva del Barça tiene la difícil tarea de solucionar estos importantes asuntos antes del debut liguero contra el Mallorca.
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